lunes, 3 de junio de 2013

Cómo rescatar a perros de la calle







    Miles de cachorros abandonados esperan que una familia les abra sus puertas. Antes de comprar uno, piense en la adopción.
Acabar con el problema de la población canina no se soluciona con la matanza indiscriminada de perros vagos. Mientras las autoridades competentes deciden qué medidas sanitarias implementar, los amantes de los animales pueden contribuir con su grano de arena.
Si desea tener una mascota, hay muchos cachorritos que esperan ansiosos una familia que pueda darles cuidado, atención y cariño. Un cuadrúpedo adulto tiene más dificultades para encontrar un nuevo hogar, pero son excelentes como guardianes y fieles compañeros.
Para adoptar al suyo puede dirigirse a una de las tantas protectoras de animales que hay a lo largo del país. En el link www.animales.cl/guiaProtectoras.asp encontrará un completo listado de instituciones (Ej: www.conciencia-animal.cl).
En muchos de estos refugios los rescatados suelen vivir en el hacinamiento, porque el número de habitantes supera al espacio con que se cuenta, que por lo general es bastante reducido. Por eso es tan importante fomentar la ayuda, pues al reubicar a uno se puede recibir a otro que aún circule por las calles sin comida ni asistencia. 
  
Otra forma de colaborar es educar a los niños y jóvenes en la tenencia responsable de especies.   Un perro, gato o roedor no sólo necesita agua y alimento para vivir, también debe estar vacunado y en constante control veterinario para prevenir enfermedades o infecciones.  
En el caso de las hembras, se recomienda la esterilización luego de la primera o segunda camada. Esta operación es sumamente necesaria para establecer un mayor control en la reproducción de canes y felinos.
También puede organizarse con un grupo de vecinos para desparasitar a los animales de su sector. De esta forma mantendrá a sus regalones libres de pulgas y garrapatas.

Ser voluntario de una agrupación o entregar donaciones a los encargados de estos recintos es una buena opción para quienes no puedan adoptar.


¡Recuerda que ellos pueden morderte, pero sin embargo no lo hacen.!

¿Esto no es triste?


Es momento de tomar las riendas, HABLA, la palabra esta en tu boca.